Quiero comenzar este blog oteando al pasado y comentarles que los relatos acá escritos estarán relacionados con las amistades que he hecho a lo largo de mi vida asociados al camino del conocimiento astrológico. Remontaré prácticamente toda mi vida, ya que la astrología ha estado asociada desde temprana edad con mi historia personal. No usaré un orden cronológico, pero si un hilo emocional importante dentro del proceso de aprendizaje, este primer relato, está asociado a una persona muy especial para mi, una maravillosa piscina que ha formado lazos muy importantes en mi vida. Piscis es un signo que he tenido la oportunidad de conocer bajo una profundidad muy especial, ya que siempre he estado ligada a una o varias personas de este signo que cobijan mis sueños para que nunca me pierda del maravilloso camino de cumplir mi misión de vida.
Fue entonces en el 2004 que yo retomaba mis estudios de astrología con la profesora Morela Pinto. Comencé a estudiar con un pequeño grupo de estudiantes muy peculiar, ya que entre ellos había, sin yo saberlo, unos muy buenos amigos de mi abuela, los conocía desde niña, pero tenía mucho años sin tener contacto con ellos. Yo pasaba de los 30 años y en mi interior estaba determinada a cambiar mi vida de una forma contundente, más adelante me daría cuenta que este curso la cambiaría de una forma muy especial. así que este pequeño grupo de estudio se me hizo desde un principio una pequeña familia astrológica.
Fue entonces que conocí a mi querida amiga Vivian Thomsen, una de las personas más serviciales, correctas y amorosas que he conocido, sus palabras, su pensamiento, su vida refleja una ternura que pocas personas pueden conservar por tanto tiempo sin ser alteradas por las dificultades de la vida. Para mi representa un pequeño ángel en la tierra que tiene la misión de proteger a unos cuantos mortales, incluyéndome a mí. Les cuento, para ese tiempo yo no tenía carro así que ella muy amable se ofreció a llevarme después de clases de astrología a mi casa lo que nos dió tiempo para platicar y comenzar lo que hoy es una de las más fuertes amistades que tengo. Vivian como lo anuncié antes es de signo piscis y le hace los honores a la perfección del signo, tiene una profesión que enlaza esa vocación de ayudar a los otros, desde el corazón y la magia de la energías internas del ser, como es la medicina china, farmaceuta. Es también una gran soñadora, siempre sueña un mundo mejor para ella, sus hijas y todos sus seres queridos, llenando de bellos detalles a aquellas personas que le rodean, creo que parte de algunos de su sufrimientos están en la bondad tan grande que tiene y que pocas veces devuelve a sí misma, pero así es la naturaleza de un piscis, se sacrifica por otros sin pensar mucho en ellos.
Puedo quedarme horas hablando de lo maravilloso que puede ser un ser humano de su clase, lo más importante dentro de toda esta historia es que ella fue la primera persona que me empujó a este camino de trabajar con la astrología. Un día trajo a mí a la primera clienta formal de astrología, Florángela Carballo, una colega de medicina china que estaba buscando asesoría astrológica y sin dudarlo me recomendó, sin saberlo en ese momento Vivian me estaba abriendo las puertas a una nueva posibilidad, ya que gracias a Flor, así la llamo con cariño, espero contarles muy pronto nuestra historia, yo comencé este camino de ser astróloga. Todavía recuerdo ese día, cuando ella me dijo: “te recomendé a una amiga”, los nervios que me dieron, ya que hasta ese momento sólo había interpretado cartas de mis amigos, familiares y la mía propia, era para mí un juego y estudio al mismo tiempo. Pero allí estaba la primera oportunidad de algo que hoy día se convertiría en mi vida laboral.
Quiero compartir un retazo de sus palabras sobre esta historia:
“Mi querida amiga y comadre Juanita, nos conocimos en un curso de Astrología hace muchos años... para mí el primero para ella un paso más en su profundización, ya que desde chiquita tuvo contacto cercano con la astrología. Íbamos juntas en el carro y compartimos no sólo el estudio sino nuestras vidas y así nació nuestra amistad y cariño. Desde ahí en adelante Juanita y la astrología forman parte de mi vida, ella se convirtió además en mi Astróloga.
He podido ver su evolución y crecimiento, es maravilloso poder estar asistida por alguien tan especial. Han sido, Juanita y la Astrología, apoyo en mis diferentes etapas y han dado claridad a cada uno de mis pasos. Estudiar Medicina China, Ejercerla, Meditar, Divorcio, Nuevo Compañero, Viajes, Nuevo trabajo, Estudios. Y poder vivir cada etapa intensamente y agradecida, cada vez en mayor claridad de que es una labor hacia adentro y que como es en el micro es en el macro, todo es uno.”
Después de este relato se puede intuir que la escogí como madrina de uno de mis hijos. Cuando quedé embarazada de Ian mi segundo hijo yo estaba en ese curso y desde entonces astrología y amistad han ido de la mano como soporte de dos seres que disfrutan mucho el ser amigos. No me queda más que agradecer el día que gracias a la astrología la conocí y con ello abrimos una gran historia juntas. Ella con su bondad pisciana y yo con mi fortaleza capricorniana complementos perfectos para una gran amistad.